«Transformación digital en un cambio de época»: Jorge Ruiz Escamilla, country manager de Botmaker
En su conferencia, Jorge Ruiz Escamilla abordó el impacto profundo que la tecnología tiene en nuestras vidas, tanto a nivel personal como empresarial. Aseguró que ya no sólo es una herramienta de apoyo, sino que ha rebasado nuestras expectativas, transformando de manera radical la forma en la que operan los negocios y cómo nos relacionamos con el mundo.
Un punto clave destacado por Ruiz Escamilla es que la tecnología ha dejado de seguir un proceso lineal de evolución. Tradicionalmente, el desarrollo tecnológico ocurría de manera paulatina, permitiendo que las personas y las organizaciones se adaptaran gradualmente a los cambios. Sin embargo, en la actualidad, el avance es exponencial, lo que genera altos niveles de incertidumbre tanto en la sociedad como en el entorno empresarial.
Esta aceleración en la innovación crea una sensación de ansiedad, ya que es difícil prever cómo la tecnología seguirá impactando en los distintos sectores. Las empresas, en particular, se enfrentan al reto de anticiparse a los cambios sin tener la certeza de hacia dónde se dirige el mercado.
Ruiz Escamilla subrayó que este ritmo vertiginoso trae consigo incertidumbre, así como la creación de nuevos ecosistemas empresariales. La tecnología está dando origen a modelos de negocio, industrias y competidores totalmente diferentes a los que estábamos acostumbrados. En lugar de competir únicamente con empresas tradicionales, ahora surgen startups tecnológicas que, con recursos limitados, pueden desafiar a gigantes consolidados. Este nuevo panorama exige que las organizaciones se mantengan alertas y sean capaces de adaptarse rápidamente.
Un tema de preocupación creciente, es la obsolescencia tecnológica, que se acelera de manera alarmante. Las herramientas, procesos y conocimientos que solían permanecer vigentes por años ahora pueden quedar desfasados en cuestión de meses. Esto representa un reto en términos de inversión empresarial y regulatorio, ya que el marco normativo no puede seguir el ritmo de la innovación. En dicho sentido, para mitigar los riesgos, es necesario encontrar un equilibrio que proteja tanto a las empresas como a los consumidores.
Uno de los aspectos que Ruiz Escamilla enfatizó es el rol fundamental que deben jugar los departamentos de Recursos Humanos en este nuevo contexto. Para él, es crucial que las organizaciones abracen la tecnología en términos técnicos y en el desarrollo de las habilidades blandas y emocionales de los empleados.
La tecnología por sí sola no garantiza el éxito; es la capacidad de las personas para adaptarse, ser creativas y manejar los errores lo que marcará la diferencia. Por lo tanto, Recursos Humanos está llamado a enfocarse en fortalecer estas habilidades, preparando a los trabajadores para utilizar nuevas herramientas y desarrollar estrategias innovadoras y resilientes frente a un entorno cambiante.
