Beneficios de una transformación energética

Por: Alonso Ortega, estudiante de maestría en Renewable Energies Engineering and Management en la Universidad de Freiburg, Alemania. Con experiencia como analista de proyectos de sustentabilidad energética

Con la reforma energética, el sector energético ha retomado una gran relevancia económica debido a la apertura del mercado eléctrico-energético. Dicha reforma ha permitido la inversión de distintos actores de relevancia mundial en el sector nacional, tanto en el sector de hidrocarburos como en el de las energías limpias.

El crecimiento del sector de las energías limpias es de sustancial importancia si México ha de cumplir con sus compromisos para una transición a las energías limpias. Sus compromisos establecidos en los NDC (National Determined Contributions) de México para el acuerdo de París, implican una reducción de Gases de Efecto Invernadero en un 22% y de un 51% de reducción de uso de carbono negro para el año 2030 (usando el año 2000 como referencia).

En este sentido, durante el 2017 la inversión en energías renovables creció cerca de 9 veces en México, ubicándolo así dentro del Top 10 de países con mayor inversión en este rubro. Siendo las energías solar y eólica, aquellas con mayor inversión.

En el caso de la energía solar, México tiene una ubicación geográfica privilegiada pudiendo recibir gran cantidad de energía solar durante casi todo el año, a diferencia de países con latitudes más pronunciadas donde la duración del día a lo largo del año juega un papel más importante. Esto aunado a una gran cantidad de radiación directa, es decir, la cantidad de día completamente nublados es menor, favoreciendo también a facilitar la explotación de dicho recurso.

Asimismo, la energía eólica juega un papel importante en la transición energética de México. A partir de la Reforma Energética se han construido distintos parques eólicos habiendo actualmente 46 en existencia. Esto significa una producción de energía primera de cerca de 4.000 MW por parte del recurso eólico y se prevé que esto siga creciendo a manera que junto con la energía solar sean las energías renovables más importantes del país.

De esta forma, la expansión del energético sustentable en México implica mucho más que sólo la inversión en generación de energía primaria. Junto a esto, el sistema eléctrico nacional debe ser capaz de integrar eficientemente las energías renovables, con las implicaciones que esto tiene.

Principalmente el problema de la intermitencia que puede incluso afectar la frecuencia de la corriente presente en la red eléctrica pudiendo tener distintas consecuencias. Así como la sobre producción de energía cuando la producción de la energía sea mucha, teniendo que apagar la planta parcial o totalmente.

Con todo lo anterior, es posible ver como el sector energético en México está creciendo a un muy buen ritmo. Si bien la Energiewende mexicana ya ha comenzado y a un buen ritmo, aún hay mucho por trabajar para que logre ser exitosa.

Esto también requiere de capital humano especializado capaz de afrontar los problemas que esta transformación implica pero que los beneficios son tanto en pro del cuidado del medio ambiente, como beneficios económicos debido a las grandes inversiones que recibe el sector.