A este rezago se suma la resistencia al cambio. Este paradigma limita la incorporación de nuevas herramientas, pues el liderazgo prefiere “lo conocido” aunque sea ineficiente. La oposición es tecnológica y cultural: aprender nuevas plataformas, cambiar de sistemas o confiar en un algoritmo requiere un proceso de desaprendizaje que muchas veces se posterga. El tercer gran desafío es el rechazo explícito a la tecnología, a menudo motivado por miedo. Algunos líderes temen que la automatización los vuelva obsoletos o que los datos reemplacen el juicio humano. En vez de ver a la Inteligencia Artificial como aliada, la perciben como amenaza. Este rechazo impide experimentar, innovar y crear sinergias, debilitando el rol estratégico de RH. El futuro del liderazgo en Recursos Humanos se bifurca en dos escenarios claros. En el primero, si las tecnologías no se adoptan con agilidad, los líderes quedarán atrapados en modelos operativos lentos, incapaces de responder a las demandas del mercado o de su talento. En el segundo escenario, los líderes se convierten en arquitectos de culturas ágiles, equitativas y digitales. Son quienes anticipan tendencias, proponen soluciones y elevan la experiencia de los colaboradores. Hoy más que nunca, desde AMEDIRH hacemos un llamado urgente a los líderes de RH: vivimos en un mundo donde no conocemos cuáles serán las próximas tecnologías que cambiarán las reglas del juego, pero sí sabemos que ya están en fase de prueba. No podemos darnos el lujo de ignorarlas. ¡El liderazgo que viene será digital! Liderazgo en el mundo digital El liderazgo hoy se mide por la capacidad de crear ecosistemas digitales donde las personas florecen y la innovación se vuelve un hábito organizacional. Ahora, un líder de RH que sabe interpretar los datos puede anticiparse al burnout de sus colaboradores, diseñar trayectorias personalizadas de desarrollo y tomar decisiones informadas con velocidad nunca antes vista. La llegada de las nuevas tecnologías de información, incluyendo la Inteligencia Artificial, ha marcado un antes y un después en cómo gestionamos el talento en las organizaciones. Herramientas como el análisis predictivo de datos, la automatización de procesos y las plataformas de aprendizaje inteligente han multiplicado la capacidad de RH para atraer, desarrollar y retener al talento más valioso. Además, la tecnología ha democratizado el acceso al conocimiento y ha vuelto más incluyente el mundo laboral. Más plataformas digitales permiten entrevistas sin sesgos, evaluaciones por competencias con algoritmos imparciales y esquemas de trabajo flexibles que respetan diversos estilos de vida. Sin embargo, el camino no está libre de objeciones. Uno de los desafíos más serios que enfrentan los líderes de RH es el rezago digital. No son pocos los equipos que aún operan con métodos del pasado: registros en papel, bases de datos inconexas y procesos manuales que impiden escalar soluciones. Esto ralentiza la operación y pone en desventaja a las empresas frente a competidores que ya operan con sistemas inteligentes. Por: Lic. Mauricio Reynoso, DIRECTOR GENERAL DE AMEDIRH EDITORIAL 4 CreandoValorRH | Julio - Agosto 2025
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