Skip to main content
Última actualización: 26 de abril de 2024
Inicio » Servicios » Noticias » Jornada laboral 5×2: ¿Qué pueden hacer las empresas para capitalizar el cambio?

Jornada laboral 5×2: ¿Qué pueden hacer las empresas para capitalizar el cambio?

18 de mayo de 2023
jornada laboral

La definición de objetivos claros y la autogestión del personal serán claves para sacarle provecho a una eventual reducción de la jornada laboral en el país. Especialistas coinciden en que las empresas deben empezar a adelantarse a los cambios normativos.

En unos meses se reanuda el período de sesiones en el Congreso de la Unión y con ello la posibilidad de que se retome la reforma para establecer una jornada laboral semanal de cinco días de trabajo y dos de descanso a nivel general. El cambio podría ser benéfico para las empresas en la medida que se cuente con acciones para capitalizarlo, coinciden especialistas en Recursos Humanos.

“Tenemos que plantear como primera premisa, hacer colaboradores más eficientes, sin caer en un tema de exigir 10,000 veces más”, opina Alejandra Toscano, directora general de la firma DNE Consulting. A decir de la especialista, una reducción de la jornada laboral puede traducirse en mayor productividad, pero conforme se adopten acciones que acompañen el cambio legal.

Antes de finalizar el período ordinario de sesiones, la Cámara de Diputados aprobó en comisiones una reforma constitucional para fijar una jornada de trabajo de cinco días laborales por cada dos días de descanso, en la práctica esto implicaría una reducción de 48 a 40 horas semanales en el límite legal. La votación en el pleno quedó pendiente, pero diversos legisladores han manifestado que será un tema en la agenda en el próximo periodo de sesiones.

“Es una decisión que se está tomando en varios países, y en México en unos meses sabremos si se aprueba. Pero así como avanzó la reforma de vacaciones dignas, yo veo que la reducción de la jornada se encamina a algo positivo”, considera Gabriela Pérez Almendariz, CEO de la firma LIVEC. En este sentido, asegura la especialista, las empresas no deben esperar a que esto se apruebe para empezar a tomar medidas.

¿Cómo se pueden preparar las empresas? Desde la perspectiva de Alejandra Toscano, se requiere definir objetivos claros, procesos ágiles, capacitación con impacto directo en los resultados, cambios en procesos de selección de personal para enfocarse en conocimientos y habilidades, formación de líderes e inversión en automatización y digitalización.

En México, hay 25.8 millones de personas que trabajan seis días por semana, representan el 44% de la población ocupada, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). La cifra proporciona una dimensión del alcance que puede tener una modificación constitucional para reducir un día de trabajo.

Para Gabriela Pérez, una clave para que las empresas no tengan un impacto negativo frente a una disminución de las horas de trabajo es contar con objetivos claros. “Con metas claras y la motivación de descansar dos días a la semana y estar más tiempo con la familia, las personas serán más productivas, porque sabrán que tendrán cinco días para llegar al objetivo, en vez de tener horarios muertos o tiempo perdido”.

De acuerdo con un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), existe evidencia de que los sectores en los que se trabaja menos horas, en promedio, son también los que mayor Producto Interno Bruto (PIB) por hora producen.

“Las empresas tienen que cambiar el chip de pensar que van a perder, lo mejor será pensar en lo que podemos ganar si nos enfocamos en resultados y en hacer más eficientes a los equipos de trabajo. Si lo percibimos como una inversión, entenderemos que es un beneficio y no un daño”, apunta Alejandra Toscano.

Según el Termómetro Laboral de OCC Mundial, el 67% de los trabajadores opina que la reforma de la jornada laboral puede beneficiar en un mejor balance vida-trabajo, y 14% considera que al sentirse más descansados, su rendimiento mejoraría. Sólo un 17% de la muestra percibe un impacto negativo, como afectaciones a la competitividad de las empresas, mayor presión para alcanzar objetivos o disminución en los niveles salariales.

Desde el punto de vista de Alejandra Toscano, éste es un buen momento para fortalecer la habilidad de autogestión de los empleados. “En muchas organizaciones no se trabajó en ello, seguimos acostumbrados a que debe haber un jefe para decirnos si lo estamos haciendo bien o mal. La función del líder es y seguirá siendo importante, pero si facultamos a los colaboradores para que se puedan autogestionar, las posibilidades de ser más eficientes serán mayores”.

¿Hay que esperar la reforma?
Las especialistas coinciden que las empresas pueden tomar acciones preventivas para que, en caso de aprobarse la reforma constitucional, no trabajen contrarreloj en la implementación. Gabriela Pérez subraya que “las empresas tienen buen tiempo” para ir haciendo algunos ajustes. “Quizá no trabajar de lunes a viernes, pero los viernes salir un poco más temprano, y empezar poco a poco para darnos cuenta que también la gente es productiva”.

En este sentido, Alejandra Toscano reconoce que los cambios no son sencillos, pero si en los centros de trabajo hay una reflexión en torno a cómo mejorar la eficiencia de los equipos, se puede empezar antes de que una reforma legal lo haga obligatorio. “La ventaja es que nos están avisando con tiempo y la probabilidad de que se dé es alta”.

México se mantiene al cabeza como el miembro de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) con más horas de trabajo al año. La fuerza laboral en nuestro país trabaja en promedio 2,128 horas al año, esto es 412 horas más que el promedio de las economías que integran el organismo.

La jornada laboral de 40 horas semanales no es algo nuevo en América Latina, aunque no es la regla, a diferencia de Europa y el norte de Asia, regiones donde este límite legal es frecuente. En nuestra región, sólo Chile (que iniciará el siguiente año la reducción gradual) y Ecuador son los únicos países que cuentan con un máximo de 40 horas por semana.

Con información de Gerardo Hernández, publicado originalmente en EL ECONOMISTA.

https://www.eleconomista.com.mx/capitalhumano/Jornada-laboral-5×2-Que-pueden-hacer-las-empresas-para-capitalizar-el-cambio-20230516-0073.html