La realidad del teletrabajo en la región: 73% de las empresas no contaba con un programa oficial antes de la crisis.

El teletrabajo, antes considerado un beneficio, pasó a convertirse en una necesidad debido a las medidas de aislamiento provocadas por el COVID-19.

De acuerdo a la investigación ​“El Estado del Trabajo Remoto en América Latina 2020”​, realizado por Rankmi​, sólo el 22% de las empresas ha logrado mantener una actividad operativa completa en lo que va de esta crisis​. Dentro de estas organizaciones, los sectores que mejor se han adaptado han sido las empresas de Tecnología (71%), las Administradoras de Fondos de Pensión (44%) y las empresas de Telecomunicaciones (44%). Además, son las pequeñas organizaciones, de menos de 500 colaboradores, las que mejor se han ajustado en esta transición.

Esta baja implementación, en gran parte, se debe a una escasa preparación por parte de las empresas en aspectos de trabajo remoto. Antes de la crisis, ​según los más de 800 líderes y profesionales de Recursos Humanos encuestados en este estudio, un 27% de las empresas en total contaba con un programa de teletrabajo formal para sus empleados​, y sólo un 37% contaba con un plan de contingencia para enfrentar este tipo de eventualidades. Además, el 73% de ellas no cuenta con un presupuesto asignado para realizar esta modalidad.

Sin embargo, el futuro se ve prometedor gracias a los procesos digitales. El 90% de las empresas dice contar con la tecnología necesaria para facilitar la opción de teletrabajar, y el 27% considera que esta es la principal herramienta para potenciar las labores de sus colaboradores. ​Además, las herramientas más utilizadas para teletrabajar corresponden a videollamadas (41%) y correos electrónicos (31%), las cuáles en muchos casos son gratuitas, de fácil implementación e incluso funcionan a través de plataformas móviles. Esta respuesta calza perfecto con algo en lo que todos los rubros, cargos y organizaciones están de acuerdo: la principal herramienta para sobrevivir a esta crisis es contar con canales de comunicación instantánea entre equipos.

Algunos de los hallazgos claves corresponden a la “aceleración digital” en tiempos de crisis, la diversificación del rol de los líderes corporativos y la nueva responsabilidad de los departamentos de Gestión de Personas para empujar la continuidad operacional. Estos los dividieron en 3 prácticas: Acelerar la digitalización, Asegurar la continuidad y Adaptar los mecanismos de comunicación.

• Aceleración digital

Las empresas de América Latina han apresurado su proceso de digitalización y el 27% considera que la tecnología es su mayor fortaleza en este nuevo desafío.

• Asegurar la continuidad

El 40% de las organizaciones cree que el nuevo rol de los líderes de Recursos Humanos, es mantener la actividad operativa, por encima de otros procesos organizacionales.

• Adaptación constante

Para adaptarse a este proceso, el 30% de los líderes cree que la Comunicación y el Feedback Continuo son fundamentales para mejorar la experiencia laboral remota.

** Revisa el estudio completo ingresando en https://www.rankmi.com/

Franco Cruzat
Gerente Regional de Marketing en
Rankmi