Necesarias políticas laborales para inclusión de madres trabajadoras
Reducir brecha salarial, aumentar la participación laboral de mujeres, así como frenar la “penalización” por salario que persiste cuando se es madre, e incluso poder ocupar un puesto directivo requieren del impulso de políticas públicas y de una mayor adopción de éstas en las empresas, refieren especialistas.
Parte de las acciones que se han impulsado para lograr que la fuerza de trabajo femenina se incremente es que se establezcan políticas encaminadas a la flexibilidad laboral, pero también a equilibrar el apoyo en los cuidados de los hijos y en donde el padre puede involucrarse, comentó Gerardina González Marroquín, directora de la Oficina para México de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Actualmente, del total de la población ocupada en el país, 38.5% son mujeres, refiere el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
En ese sentido, la OIT destacó que “las medidas destinadas a promover la armonización de las responsabilidades laborales y familiares, como, por ejemplo, los servicios para el cuidado de niños, no deben estar dirigidas exclusivamente a las mujeres. Para lograr esto, el Convenio 156 sobre los trabajadores con responsabilidades familiares de la OIT sienta las bases para la creación de normas y políticas públicas dirigidas a equilibrar el trabajo y el cuidado de la familia, a fin de que quienes estén en esta situación puedan acceder a un trabajo estable y sin discriminación”.
La posición, en el trabajo de las mujeres de 15 años y más ocupadas que son madres representa 14.8 millones, muestra que apenas 3.1% son empleadoras (es decir, contratan personal), 5.8% son trabajadoras sin pago, 26.5% trabaja por cuenta propia y el resto se concentra en trabajadoras subordinadas remuneradas, que representan 64.6 por ciento.
Especialistas del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección refieren que México no impulsa políticas familiarmente responsables, se requieren de políticas que permitan tener, incluso, redes de apoyo en donde el esposo, los abuelos y los hijos sean los principales actores, pero también buscan flexibilidad en el horario, y en las actividades que desarrollan para establecer un equilibrio.
La reforma laboral “rescata el espíritu de las madres que trabajan, con perspectiva de género y reconoce el liderazgo que tienen para poder participar como fuerza laboral”, afirmó Alfredo Domínguez Marrufo, subsecretario de Trabajo de la STPS.
Con información de El Economista.
