Hablemos de la satisfacción laboral

La motivación y satisfacción laboral, las competencias o el compromiso de los trabajadores, son una parte esencial del capital humano para el buen funcionamiento de una organización.

Se le llama capital humano a la dimensión del valor económico que una persona es capaz de producir con sus habilidades profesionales; al igual que a las horas que dedican a la producción de bienes o servicios.

El capital humano es precisamente el encargado de generar los otros dos tipos de capital, el estructural (cultura organizacional, sistemas de información, procesos de trabajo, etc.) y el relacional (las relaciones que los empleados forjan con los clientes, proveedores y otros grupos de interés de la empresa, formando todos ellos el capital intelectual que una organización determinada posee en un momento concreto.

Siendo entonces un engranaje primordial en la funcionalidad de la empresa, es recomendable tener en cuenta los factores que más se han relacionado con altos grados de satisfacción laboral

1. Salarios y políticas de promociones y ascensos justas dentro de la organización. En la percepción de justicia influyen la comparación social, las demandas del trabajo en sí y las habilidades del individuo, de la mano con los estándares de salario de la comunidad.
2. Las tareas intelectualmente estimulantes, que no sólo despertarán en el trabajador la sensación de desafío sino que, a largo plazo, le ayudarán a conservar de mejor forma las habilidades de pensamiento y memoria.
3. Reconocimiento del trabajo realizado. No hay persona que no guste de que aprecien su trabajo y le reconozcan de manera positiva. Esto hace que el colaborador se sienta útil y orgulloso.
4. Condiciones ambientales óptimas, tanto higiénicas como de seguridad y esparcimiento. Un ambiente físico cómodo y adecuado, favorecerá el desempeño del colaborador.
5. La buena relación con jefes. Este es uno de los principales determinantes de la satisfacción del trabajador: los empleados con líderes más tolerantes y considerados (en la debida medida) se expresan mucho más conformes y comprometidos con la empresa. Un líder poco empático, intolerante y excluyente causa el efecto contrario.
6. El trabajo cubre necesidades de interacción social también, así que fomentar los lazos de respeto, camaradería y simpatía entre los colaboradores, ayudará no únicamente a la satisfacción laboral, sino a procurar el correcto desempeño del equipo.

Hay que recordar siempre que el buen ambiente y la relación laboral amable entre las partes involucradas, aumenta la productividad y eso genera mejores ganancias para la organización. Es mejor no escatimar en el buen funcionamiento del capital humano si no hay necesidad de ello.

Con información de:

Jaén Díaz, M. (2010). Predicción del rendimiento laboral a partir de indicadores de motivación, personalidad y percepción de factores psicosociales. Doctorado. Universidad Complutense de Madrid